La bronca de los trabajadores de Mahle volvió a estallar con fuerza y no es para menos. La patronal alemana, amparándose en una supuesta deuda de la nación para con esa multinacional, tomo la decisión de no abonar la segunda quincena de julio. Esto lo hace a pesar de seguir vigente la conciliación voluntaria dictada y prorrogada por la cartera de trabajo provincial. Esto sucede la misma semana en que se puso de manifiesto que la propuesta alcanzada pocos días atrás por el gobierno nacional a través de “patota” Moreno de expropiar la fábrica para ponerla en manos de los trabajadores en la figura de un fideicomiso, era solo un verso para ganar tiempo que el propio Aníbal Fernández se encargó de desmentir argumentando que este no es un “Estado empresarial”.
Los trabajadores, hartos de tantas maniobras tomaron la decisión en asamblea de movilizarse a la ciudad de Rafaela, donde Mahle aún tiene funcionando una fábrica de mas de 700 trabajadores para pedir la solidaridad de los compañeros de allá. Cientos de obreros en micros y autos fueron hasta allí y lograron que esa fábrica pare la totalidad de sus turnos instalando a la vez un campamento en la puerta que recibió la solidaridad de gran parte de esta importante localidad del norte santafesino. La patronal, al verse desbordada por la extensión del conflicto a su planta modelo, termina por patear el tablero generando de hecho un look out al cerrar preventivamente la planta en pos de “proteger” las instalaciones, pero con el verdadero objetivo de intentar quebrar la unidad de hecho que se dio entre los trabajadores de Rosario y Rafaela, que protagonizaron algo inédito desde hace muchos años en el gremio metalúrgico: parar exclusivamente en solidaridad con otro establecimiento.
Al cierre de esta edición, y ante la levantada del plan de lucha nacional de la UOM, los compañeros de Mahle Rosario preparaban para el miércoles 12 una movilización de toda la planta a la sede rosarina del sindicato para reclamar la inmediata convocatoria a un paro regional metalúrgico y que este reclamo sea elevado también a la CGT local para que se sume al mismo. Además, se reclama la inmediata convocatoria a un congreso de delegados para organizar las actividades de resistencia hasta encontrarle una solución definitiva al conflicto. Otro de los reclamos, muy importante, es la puesta en marcha de un fondo de lucha para impulsar colectas y evitar que la pelea se debilite por el ahogo económico sobre los compañeros y sus familias.
El relanzamiento de la multisectorial de apoyo a Mahle esta semana, preanuncia la implementación de medidas aún mas duras que apunten a definir de una vez por todas la situación.
Mientras, la crisis económica hace cada vez más difícil la aparición de “compradores”, y el gobierno nacional mira para otro lado, al punto que el Ministro Tomada, por estos días no atiende a la Comisión Interna. El gobierno santafesino del PS, que solo envía funcionarios en “solidaridad” a las distintas acciones y le pasa la pelota a Nación tiene que tomar cartas inmediatas en el asunto. La Ley provincial 7534 lo avala a provincializar la fábrica declarándola de utilidad pública. Incluso, al iniciarse el conflicto, el senador provincial del PS, Juan Carlos Zabalza, presentó un proyecto de ley en ese sentido, aunque de manera formal, ya que lo ingresó por senadores donde el Reutemismo tiene mayoría buscando de esta forma su empantanamiento, cuando podría tener ya media sanción en diputados donde el PS es hegemónico. Movilizarse para que este proyecto se apruebe debería ser una de las tareas planteadas para que esta lucha triunfe.
Los trabajadores, hartos de tantas maniobras tomaron la decisión en asamblea de movilizarse a la ciudad de Rafaela, donde Mahle aún tiene funcionando una fábrica de mas de 700 trabajadores para pedir la solidaridad de los compañeros de allá. Cientos de obreros en micros y autos fueron hasta allí y lograron que esa fábrica pare la totalidad de sus turnos instalando a la vez un campamento en la puerta que recibió la solidaridad de gran parte de esta importante localidad del norte santafesino. La patronal, al verse desbordada por la extensión del conflicto a su planta modelo, termina por patear el tablero generando de hecho un look out al cerrar preventivamente la planta en pos de “proteger” las instalaciones, pero con el verdadero objetivo de intentar quebrar la unidad de hecho que se dio entre los trabajadores de Rosario y Rafaela, que protagonizaron algo inédito desde hace muchos años en el gremio metalúrgico: parar exclusivamente en solidaridad con otro establecimiento.
Al cierre de esta edición, y ante la levantada del plan de lucha nacional de la UOM, los compañeros de Mahle Rosario preparaban para el miércoles 12 una movilización de toda la planta a la sede rosarina del sindicato para reclamar la inmediata convocatoria a un paro regional metalúrgico y que este reclamo sea elevado también a la CGT local para que se sume al mismo. Además, se reclama la inmediata convocatoria a un congreso de delegados para organizar las actividades de resistencia hasta encontrarle una solución definitiva al conflicto. Otro de los reclamos, muy importante, es la puesta en marcha de un fondo de lucha para impulsar colectas y evitar que la pelea se debilite por el ahogo económico sobre los compañeros y sus familias.
El relanzamiento de la multisectorial de apoyo a Mahle esta semana, preanuncia la implementación de medidas aún mas duras que apunten a definir de una vez por todas la situación.
Mientras, la crisis económica hace cada vez más difícil la aparición de “compradores”, y el gobierno nacional mira para otro lado, al punto que el Ministro Tomada, por estos días no atiende a la Comisión Interna. El gobierno santafesino del PS, que solo envía funcionarios en “solidaridad” a las distintas acciones y le pasa la pelota a Nación tiene que tomar cartas inmediatas en el asunto. La Ley provincial 7534 lo avala a provincializar la fábrica declarándola de utilidad pública. Incluso, al iniciarse el conflicto, el senador provincial del PS, Juan Carlos Zabalza, presentó un proyecto de ley en ese sentido, aunque de manera formal, ya que lo ingresó por senadores donde el Reutemismo tiene mayoría buscando de esta forma su empantanamiento, cuando podría tener ya media sanción en diputados donde el PS es hegemónico. Movilizarse para que este proyecto se apruebe debería ser una de las tareas planteadas para que esta lucha triunfe.
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